martes, 3 de febrero de 2009
mirar, reconocer, memoria y memorial
(observación: lo siguiente es un poco críptico, ¡plop!)
No sé si viene al caso, el nombre, la foto... creo que el recuerdo es otro y está mas allá de eso; la Historia no puede ser así, me niego a pensar que se trata de esos "grandes hombres" o incluso de esas "grandes mujeres", sería deshonroso para ellxs, para mis ellxs, nuestrxs ellxs (y por nosotrxs, que lxs "grandes" [burguesxs] sigan ahí en sus libros, en sus fotos muertas, con sus secas miradas y su historia) que entendieron que nunca se trata de eso.
...La humanidad, la Revolución... hoy no es el día para las diatribas, sólo me pareció un gesto que no intenta ser sobre todo genealógico, es sólo un cierto mirar. Veo sus ojos y sus sonrisas, los rostros graves, serios y comprometidos. Reconocer.
A cada unx nos deberían fotografiar la cara en los momentos cruciales, el espejo no basta; y pienso en todxs lxs no fotografiadxs y caigo en cuenta del absurdo y luego pienso en que no se trata de eso y el absurdo desaparece. Memoria y Memorial.
Mirar a lxs otrxs es mirarse a unx mismx.
Yo hoy no quiero esas patéticas genealogías incompletas, parciales y con nombres que nadie, o pocxs, recuerdan.
Yo quiero traer al presente esas arrugas que un rostro vivo por fuerza tiene.
Algunas de las Mujeres de la Comuna de París, 1871
Louise Michel
Louise Michel con los comuneros, de Jules Girardeth
Marie Christé
Hortense David-Clara Fournier-Louise Bonenfant
Paule Mink-Félicité Paul-Pauline Bourrette-Laure-Amable Rigal
Catherine Olivier-Marie Garry-Las Hermanas Clémence-Angèle Durut
Una mujer, Louise Michel y Paulina Mekarska (Paule Mink)
Le Mossu-Charlotte Tisserand-Marie Lecourt-Victorine Eudes-Marie Lecomte
Judith David-Joséphine Marchais-FranÁoise Humbert
Lacroix-Angelina Courcelles
Samblancarn-Leroy-Reine Cottin-Désirée Dumont-Rita Landier
Arthur-Marie Davier-Gadin-Marguerite Prévost
Louise Mesleer-Legros-Clériot-Blanche de Corbie-Marquet
Vautrain-Victorine Gorget-Louise Boutin-Augustine Gamel-Léontine Suetens
Morel-Eulalie Lavapoine-Martel Baudin-Domiens
Joséphine Bocquin-Agustine Prévot-Marie Guyord
Elisabeth Rétiffe-Eugénie Robit
Nathalie Lemel-Grenier-Eugénie Boulanger-Marie Menan
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2 comentarios:
si, de acuerdo. Mirar esa otra realidad es mirar esta realidad. Es gente que no ha muerto no porque recordemos su nombre o su rostro, sino porque se continúa en la humanidad misma. Porque somos todos.
Vine a verte desde cerebrodarwin.blogspot.com, a raíz del comentario que dejaste.
Siempre me interesó el tema de la comuna de París. Habría sido una gran oportunidad histórica para haber construido una sociedad conforme al sistema anhelado por Marx. Porque Marx estuvo allí. Con lo cual habría sido una sociedad comunista en el sentido querido por Marx y Engels. (Por eso no se la dejó seguir.) Nada que ver con lo que han hecho después esa ralea de indeseables como Stalin, Mao o el actual dictador de Corea del Norte (ese tirano que lleva el pelo cardado y alzas en los zapatos para parecer más alto -pero ni aun así-).
En fin, qué pena que los ideales más hermosos de la humanidad, como el comunismo de Marx, caigan en manos de depravados y canallas, como son los desalmados antes referidos. Gente que echó a los tiranos de sus palacios para acto seguido colarse ellos dentro (como sucedió en la revolución francesa -mataron a Luix XVI y se quedaron dentro del palacio-, en la revolución rusa -mataron al zar Nicolás II y se quedaron dentro de su palacio, ahora reconvertido en kremlin-, o en Cuba -Fidel Castro echó a Batista y luego se autonombró dictador "militar" vitalicio-).
Pero viendo a estas mujeres de la comuna de París, tan brillantemente recogidas en tu blog, uno se permite seguir soñando con la pequeña utopía realizable, con la quimera de una vida y una humanidad mejores.
(Emilia Alarcón)
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